MEDICAMENTOS CLÁSICOS DE LA PERSONALIDAD: NUX VÓMICA (PRIMERA PARTE)
Por el Dr. Gilberto Quintero Ramírez

Nux vómica es un individuo reconocido en el mundo de la Materia Médica por sus excesos y las consecuencias de los mismos. Es uno de los más adictos a toda clase de estímulos, el más famoso de los alcohólicos y un juerguista consuetudinario que va por la vida sin ponerle medida a nada. Todo aquello que le brinda placer es buscado con denuedo y rebosamiento por este individuo. Se excede lo mismo en su trabajo como en el consumo de bebidas y alimentos, vive cada día como si fuera el último, duerme muy poco y se pierde en excesos sexuales que lo conducen a una existencia de disipación y desgaste. Todo en él tiene el matiz de los excesos, su voz es muy fuerte y sonora, habla y se expresa con gran vehemencia y de manera contundente, gusta de las cosas más intensas y en grandes dosis (sabores, licores, romances, aventuras y placeres de toda clase). Es arrebatado e impulsivo, nada lo contiene y a nada teme.

La hipersensibilidad generalizada es otra de sus características. Así encontramos que no soporta los ruidos, la luz, el frío ni la compañía, que se siente triste pero no puede llorar (como Natrum muriaticum), que los olores le causan náuseas y mareos, y que se encuentra mucho peor de mañana, hora del día en que está muy irritable, malhumorado e intolerante, al grado de la ira incontrolada y de la violencia en sus actos. Esta gran sensibilidad es el resultado directo de todos sus excesos.

Cabe mencionar, no obstante, que esta fase descrita es patológica y nos muestra a un individuo deteriorado, embotado, con una reactividad incontrolada, lleno de temores (a las desgracias, al infortunio, a la pobreza o a que suceda algo) y ansiedad o angustia; un sujeto aislado, indiferente o pesimista, celoso al grado de la violencia criminal y que en su depresión puede llegar a la hipocondría o a la locura.

Sin embargo no siempre es así. Hay un tiempo en el que la personalidad Nux no solo está equilibrada sino que es uno de los individuos más sanos de toda la Farmacodinamia. Nux en equilibrio posee una de las cualidades m{as positivas: Confianza en sí mismo, una gran seguridad en su propia persona que se manifiesta en un ánimo positivo y festivo, en un optimismo y una alegría a prueba de todo. Esta seguridad suele ser, como todo en él, excesiva y manifiesta, desbordante e intensa. Mientras más aparente adversidad tiene que encarar Nux, con más certeza interior responde. Por todo esto, es el líder por excelencia, un individuo buscado e incluso aclamado por quienes están a su alrededor. Inspira confianza y contagia a los demás de su seguridad.

Todos lo siguen porque siempre parece saber lo que hay qué hacer, cuál es el camino a seguir y cómo resolver los problemas. La mayoría de las veces no tiene ni la más remota idea, pero no le importa porque es más emocional e intuitivo que intelectual y racional. Los sujetos Nux saben con completa certeza que una vez llegado cada momento, sabrán que hacer y todo saldrá bien. Son sagaces y muy perceptivos, con gran capacidad para improvisar. Nunca se preocupan ni manifiestan temor o incertidumbre; ven la vida como si se tratara de una fiesta interminable y llena de sorpresas.

Esta seguridad no sólo lo convierte en líder nato sino también en el hombre más atractivo para las mujeres, a pesar de que muchas veces no tiene un cuerpo gracioso o bien proporcionado (su vida tan intensa lo hace desgarbado o un tanto obeso) ni posee riquezas o posición social. Los Nux no cuidan su imagen lo más mínimo, visten de la manera más espontánea y se expresan sin pudor ni cuidado, con una franqueza transparente y refrescante que aunque a veces raya en lo vulgar nunca suena mal en ellos.

Hacen dinero con gran facilidad y tienen un imán para el éxito en todas las esferas y ámbitos, pero también se caracterizan por ser extremadamente derrochadores y consumistas. Los más sanos suelen ser muy ordenados con sus recursos pero sin caer jamás en la avaricia. Nux vive en el presente, disfrutando a tope de la vida y con la seguridad de que no sólo podrá realizar siempre lo que ahora hace sino que en el futuro realizará mejor sus tareas y tendrá un mejor desempeño. Nunca duda en manifestárselo a los demás, y aunque a veces puede caer en la exageración o en la fanfarronería, suele oírse honesto y natural las más de las veces.

A diferencia de los más enfermos, este Nux más equilibrado, suele ser un hombre de principios, con un gran sentido de honor que lo lleva a asumir siempre las consecuencias de sus actos y decisiones. Puede ser exagerado pero no miente, nunca evade sus responsabilidades ni deja en duda el valor de su palabra. No traicionará a quienes ama. Luchará por los débiles. La injusticia, como le sucede a Causticum, lo lleva a actuar con decisión y generosidad, cuestionando y peleando si es necesario. La intensidad de sus afectos, que en estados más patológicos lo lleva a la promiscuidad, aquí se manifiesta como una capacidad de entrega y amor incomparables Nux ama con pasión y ardor, como si la relación acabara de iniciar o la conquista cotidiana fuera su vocación, llegando a volverse literalmente adicto a su mujer amada, colmándola diariamente de atenciones y cariño.

Los dos motores en la vida de Nux son la competencia y el hedonismo. Nux vive compitiendo y disfruta cada conflicto o enfrentamiento como si de un juego se tratara, le fascina competir pero mucho m{as le agrada ganar; nunca se rinde ni pierde el buen ánimo. Las derrotas espolean este impulso de competencia, mostrándose no sólo ecuánime sino incluso gustoso y exultante ante el fracaso o las pérdidas (lo cual acentúa todavía más su carisma como líder).

La búsqueda y la obtención del placer es su otro impulso vital. Nux ve la vida como un banquete delicioso, como una fiesta como un juego. Gusta de todo lo que es grato, sensual, sabroso y disfrutable, buscándolo sin medida alguna lo cual constituye en potencia uno de sus mayores puntos débiles. La gente Nux más sana tiene estos dos motores en equilibrio y potenciados en cierta manera: Lo que más disfruta es competir, trabajar y vivir de acuerdo a sus convicciones.

Sin embargo, y sobre todo sin reprimen su intensa naturaleza, es muy fácil que Nux escuche la primitiva voz de sus instintos y caiga en todas las tentaciones que se le presentan. Es entonces cuando su otra magnifica cualidad, la carencia de culpa, que le permite fluir en la vida con firmes pasos, se le revierte y lo hunde en una vorágine sin retorno de pasiones y desenfreno que lo habrán de llevar a perder su candor y pureza, convirtiéndose entonces en un ser primitivo y trasgresor, instintivo y egoísta que confunde amor con posesión y liderazgo con tiranía.