Depresión e impulsos suicidas
Gilberto Quintero Ramírez

En el boletín de Marzo de 2011, al cual los remitimos para mayor información, se había abordado el tema de la depresión y se exponían los medicamentos más importantes bajo este rubro. En el presente boletín se actualiza el tema haciendo un especial hincapié en aquellos medicamentos con impulsos suicidas y de auto destrucción.
Alumina: Desarrolla impulsos suicidas repentinos al ver instrumentos cortantes como cuchillos, o también ante la presencia de sangre. Estos impulsos en algunos casos pueden ser también homicidas. En la mayoría de los casos estos pensamientos intrusivos aterrorizan al paciente quien trata de evitarlos a toda costa. Antimonium crudum: Curiosamente tiene pensamientos suicidas sin impulsos, el paciente no desea matarse, pero no puede apartar de su mente la idea de acabar con su existencia, sobre todo dándose un tiro. Estas ideas obsesivas y persistentes se recrudecen durante la noche.
Arsenicum album: Aunque también lo puede presentar Hepar sulphur, los individuos Arsenicum en los momentos más intensos de su agonía y angustia pueden prenderse fuego, como una forma de acabar con su vida, con su ansiedad y, sobre todo, con su culpa. También puede tener pensamientos suicidas después de un susto o una fuerte impresión. Peor después de la medianoche.
Aurum metallicum: Presenta la depresión más extrema y destructiva; su existencia se caracteriza por gravitar alrededor de la muerte, de su muerte. Aurum es el medicamento más culposo de la Materia Medica, además del más suicida. También se obsesionan por algún pecado que imaginan haber cometido, un acto terrible de irresponsabilidad, y se sienten indignos. Aurum muriaticum: Muy semejante a Aurum metallicum, este remedio acumula una gran desesperación e insondable tristeza en su interior. Sin embargo, sus impulsos tienen, a la vez, una base de furia e irritabilidad. Aurum muriaticum es el único remedio que se encoleriza cuando piensa o recuerda sus afecciones. No tolera las limitaciones ni la enfermedad, todo lo cual lo puede llevar a buscar la muerte.
Capsicum annum: Por extrema e insoportable nostalgia. El tiempo pasado le parece mejor y maravilloso y, por contraposición, su presente se le torna insoportable. Todos los seres humanos pueden experimentar nostalgia en algún momento de sus vidas, y es natural, sin embargo, cuando se asocia a intensas depresiones –sobre todo de ancianos– al grado de abominar su existencia actual, puede pensarse en este remedio y diferenciarlo de Carbo animalis a quien la extrema nostalgia hace que le duela el presente y lo deteste.
China officinalis: Está cansado de la vida porque la vida es demasiado cruda, densa y agresiva para esta personalidad. Piensa continuamente en el fin de la vida, pero le falta el valor y la decisión para suicidarse, incluso puede presentar pensamientos e impulsos suicidas acompañados de miedo a la muerte. Muy indicado en personas críticas e intolerantes que también esconden una profunda insatisfacción con su propia existencia.
Hippomanes: En cuadros depresivos caracterizados por extremo aislamiento, el paciente se encierra en su cuarto, le da la espalda al mundo y se mece el pelo continuamente. No reacciona ni se siente motivado por nada, como si estuviera muerto en vida. Estos pacientes difícilmente pueden suicidarse, pero se dejan morir en vida. Este cuadro tan extremo puede ser el resultado de múltiples circunstancias: Penas, decepciones, frustraciones, deterioro vital, etc., pero también puede activarse repentinamente a consecuencia de una vivencia dramática o una trágica pérdida.
Kalium bromatum: Impulsos suicidas asociados a estados de melancolía o desesperación religiosa, el paciente genera ideas obsesivas de orden religioso y puede convencerse que Dios le está ordenando acabar con su vida (en estados de mayor deterioro mental este mismo síntoma puede verse en Agaricus, Stramonium, Anacardium y Lachesis, aunque no suele ser tan impulsivo ni asociarse a tan intensa depresión como en Kali bromatum).
Los pensamientos suicidas se agravan de noche, con insomnio pertinaz que caracteriza a este remedio.
Lac defloratum: Indicado en las personas que recurrentemente, y por muchos años, piensan constantemente en la manera más fácil, efectiva e indolora de suicidarse. Muchos pacientes comienzan a hacerlo como un juego, luego se les torna una obsesión y ante una repentina tristeza o adversidad pueden llevarlo a cabo.
Mercurius vivus: Son personas que suelen acabar con sus vidas dejándose morir de hambre o por métodos muy violentos, para producirse gran agonía antes de morir. Asimismo, es el medicamento más homicida de la Materia Medica, por lo cual, como Aurum, es común que acabe también con la vida de sus seres queridos antes de acabar con la propia. La violencia extrema y la vulnerabilidad general marcan las claves de este medicamento.
Naja tripudians: Puede estar indicado en impulsos suicidas aparentemente sin motivo, en depresiones agudas o incluso asociados a trastornos mentales, pero todo esto generalmente de orden muy agudo.
Natrum sulphuricum: Uno de los medicamentos más suicidas de la Materia Medica sobre todo asociado a causas orgánicas como traumatismos cefálicos o sobre todo, en tumores o afecciones neurológicas que alteran el comportamiento del sujeto. Los impulsos suicidas pueden ser totalmente absurdos e inexplicables.
Psorinum: Representa, junto con Aurum, uno de los estados más oscuros y desolados del alma humana, un estado de máxima pobreza vital, de carencia extrema e inaudita. Es el final de todos los caminos de la patología, dónde desembocan otros remedios de máximo destrucción como Aurum metallicum, Mercurius vivus o Arsenicum, inclusive. En Psorinum encontramos la depresión máxima, el vacío absoluto, donde no hay alivio alguno. A diferencia de Aurum estos pacientes no encuentran alivio en el pensamiento de la muerte, sólo prolonga su agonía, porque les falta valor para acabar con su existencia, pero, por otro lado, poseen también la culpa, la ansiedad y la angustia extremas, así como la minusvalía y el sentimiento de abandono y dolor emocional.
Stramonium: Indicado en personas que como Natrum sulphuricum tienen afecciones neurológicas que los llevan a generar incontrolables impulsos violentos y sumamente destructivos, que pueden ser enfocados contra el mismo paciente. Estos pacientes son capaces de herirse o de suicidarse con sus propias manos, estrangulándose, golpeándose en grado extremo.
Zincum metallicum: La ansiedad y la inquietud de este remedio sustentan la autodestructividad que puede desarrollar posteriormente. La gente Zincum tiene graves dificultades para entender y relacionarse con el mundo exterior, y la respuesta ante esta incapacidad es la inquietud, sobre todo de naturaleza ascendente, y la ansiedad.